Pasarela de Arganzuela
Ingeniería estructural por
MC2
Arquitectura por
Dominique Perrault Architecture
Contratista
Acciona
Construido
2011
Ancho
4.5-7.35 m
Longitud
150 m + 128 m
Vano principal
115 m
Localización
Madrid, España

Introducción

El puente pasarela de Arganzuela forma parte del reciente plan urbano de Madrid, llamado Madrid Río, una zona peatonal y de recreo construida entre los años 2006 a 2011 en los márgenes del río Manzanares, sobre el trazado soterrado de la vía de circunvalación M-30 desde el nudo Sur hasta el enlace con la A-5. Esta zona de recreo sirve como conexión para los distritos de Arganzuela y Carabanchel, entre la calle de Antonio López y el Paseo de Yeserías.

La pasarela consiste en dos cuerpos independientes, de ejes no alineados, que se encuentran en una colina artificial por la que se puede bajar al parque. Tiene carriles tanto para peatones como ciclistas. El puente sur, de 150 m de largo, salva el Río Manzanares con un vano de 115 m, mientras que el norte pasa por encima del Parque, con una longitud total de 128 m y un vano de 96 m. Cada pasarela está inscrita en una superficie tronco-cónica, de sección circular que va variando desde los 6 m de diámetro hasta los 12 m en las zonas más anchas.

Diseño estructural

La estructura es una celosía espacial, pero no común, al ser sus diagonales curvas. Hay muchos elementos en estas celosías, pero los estructurales, es decir, los que soportan las cargas, son las diagonales curvas y los 4 cordones longitudinales, dos arriba y dos abajo separados entre ellos 90º, que tienen una sección de 450×450 mm. Los elementos no estructurales son las costillas de acero sobre las que se sostiene la “piel” permeable conformada por una malla metálica que cubre 2/3 de la superficie total, dispuesta para proporcionar sombra a los transeúntes.

Las diagonales se desarrollan a lo largo de cuatro hélices que se pueden agrupar en dos familias de direcciones opuestas. De esta forma, hay seis barras confluyendo en cada nudo de la celosía, esto es, un cordón longitudinal y dos hélices, con un total de 139 nudos. Estas diagonales tienen secciones pseudo-cuadradas, como los cordones, donde las caras interior y exterior son curvas, contenidas en dos superficies cónicas, mientras que las otras dos caras son perpendiculares y rectas.

Esta configuración resulta en dos celosías similares pseudo-Warren, con diagonales curvas fuera de su plano, conectadas por otras dos celosías similares arriba y abajo. El hecho de que estas diagonales no estén contenidas en un plano, genera flexiones indeseadas, por lo que parte de la eficiencia se pierde. Esto es crítico en las diagonales cercanas a las pilas, donde grandes deformaciones de acortamiento y alargamiento producen grandes deformaciones por cortante.

En cada extremo de cada puente se dispone una pareja de pilas prefabricadas e inclinadas, siguiendo de forma aproximada la inclinación de las diagonales principales. La “doble inclinación” de las pilas implica grandes flexiones que tratan de reducirse durante la construcción, con el diseño del proceso constructivo.

En una primera fase, las bases de las pilas se rotulan para permitir rotación cuando la estructura se desapea, bajo su propio peso y las cargas muertas, comportándose entonces como vigas simplemente apoyadas. En una segunda fase, una vez que este giro bajo cargas permanentes ha tenido lugar, las bases se fijan, de manera que actúen como conexión empotrada para las futuras cargas.

El extremo superior de las pilas está completamente soldado contra la diagonal principal que transfiere la carga desde la estructura principal. Las otras barras que confluyen en esta junta (cordones y diagonales) tienen conexiones rotuladas para evitar generar momentos y altas tensiones generadas a través de la estrecha conexión. Estas rótulas tienen una geometría complicada debido a la inclinación de todos los elementos, y se encuentran dentro de las dimensiones del cordón longitudinal.

La cimentación está formada por pilotes y micropilotes, y cada par de pilas tiene un encepado común. Tres de los cuatro encepados se sitúan justo encima o muy cerca de la carretera e instalaciones subterráneas, en algunos casos apoyándose en las pantallas de la M-30.

Otros datos estructurales

  • En el interior de las pasarelas hay una estructura metálica que sostiene la superficie de madera por la que circulan peatones y ciclistas.
  • El encuentro entre los dos puentes, aunque no se vea, está formado por dos tableros de estructura metálica, separados en altura. El inferior salva el vano de los túneles de la M-30 que se encuentran por debajo, y el superior es el que permite el paso peatonal por encima. Entre medias, se rellena de Polietileno Expandido, y se entierra todo posteriormente creando la colina artificial que permite el acceso al parque desde la confluencia entre pasarelas.

Vídeo

Fotos

Fotos

Planos

Pin it
Pin it
Pin it
Pin it
Pin it
Pin it
Pin it
Pin it
Pin it