EPISODIO II: EDUARDO TORROJA
Primera parte: Los años hasta la Guerra Civil (1899-1936)
(Cuadro de Damián Flores)
2/ Eduardo Torroja Miret nace en 1899 en Madrid y siempre se sintió muy madrileño. Él fue, además, profeta en su hogar y en ella se encuentran algunas de sus mejores obras.
Su padre, sus dos hermanos y él mismo fueron académicos de la Real Academia de las Ciencias…casi nada.
3/ Estudió Caminos y, tras trabajar con José Eugenio Ribera, monta su propia oficina de proyectos, que todavía hoy, noventa años después, es una de las más importantes de España.
Comencemos el repaso de sus mejores obras hasta 1936.
Comenzamos en Jerez, con el Acueducto de Tempul.
4/ Acueducto sobre el río Guadalete para abastecer de agua Jerez, que en palabras de Torroja “la vieja ciudad española que produce los nobles vinos de Jerez, necesitan también a veces beber agua”… 🙂 Lo dejó escrito, no invento.
5/ Obra de 1925 tenía el problema de que las dos pilas proyectadas inicialmente caían el cauce y no gustaba nada la solución con las crecidas del Guadalete.
¿Qué hace Torroja? Inventa por primera vez en la historia el puente atirantado…como el de Barrios de Luna 😳? Correcto
6/ Elimina las dos pila del cauce y cuelga ese vano de tirantes en cable de acero. No se había hecho hasta la fecha y lo hizo un joven de 26 años.
Lo hizo antes que nadie y en un momento en que no se había desarrollado la tecnología.
7/ Como no se podía dar tensión a los cables en esas fechas, lo hace subiendo la cabeza de la torre. Con eso al pasar los cables de la longitud roja a la azul (mayor) entraban en tensión. ¿Fácil? Visto ahora sí, en 1925 una genialidad. Una de las mil que hizo.
8/ La creatividad de Torroja era infinita, mimaba las ideas, les daba mil vueltas hasta resolverlo a su gusto; ya, pasaba a la siguiente. Podía haberse dedicado a explorar las posibilidades de los puentes atirantados, pero había surgido como solución a algo. A otra cosa.
9/ Donde Torroja revolucionó el mundo del hormigón armado, que había nacido a finales del siglo XIX, fue con sus láminas de hormigón. Merece la pena detenerse en ellas que contar mal más cosas…creo.
Y en 1933 demuestra por primera vez de lo que es capaz el material con el mercado de Algeciras.
10/ Es un casquete esférico de 47,62 m (medio campo de fútbol) que diseñó con el arquitecto Sánchez Arcas. Y con una maravillosa claraboya octogonal de 10 m.
El trabajo hasta la Guerra Civil con arquitectos fue constante y dio unos frutos geniales.
11/ El mercado es un casquete esférico que apoya en ocho soportes únicamente como se ve marcado en este plano.
Imaginad media naranja apoyada solo en ocho puntos, que pasaría con todo el borde fuera de apoyos? Tendería a caer, ¿verdad?
12/ Torroja, para evitar esto, elimina los bordes de la esfera antes de llegar al borde y los rigidiza con “viseras” cilíndricas recortadas. Lo podéis ver bien en esta foto en amarillo.
Algo que parecería un remate estético evita que los bordes se “caigan”. Hay mucha ciencia ahí.
13/ Y para evitar que la cúpula se “despatarre” y se abra? Une todos los apoyos con unos tensores que evitan que cedan y la carga solo sea vertical. Aquí creo que se entiende bien en este esquema.
Si el trabajo de los ingenieros está en resolver bien los detalles, Torroja es el rey.
14/ Como a toda catedral se entra en silencio y con respeto, entremos a la de los Ingenieros de Caminos: en el Hipódromo de la Zarzuela.
Voy a relataros cómo se gesta una catedral. Y voy a tardar en escribir esto mucho más que él en crearla 😉
15/ Salió a concurso con tres meses de plazo, de los cuales la mayor parte de ellos se ocuparon en entender y diseñar los aspectos funcionales de un hipódromo.
Esta es la sección que tenían a pocos días de presentar. Y, como dice Torroja, lo daban por perdido.
16/ Y una noche, a la una de la mañana en su despacho, en unos segundos el lápiz de Torroja crea el cambio.
He preparado unos esquemas y solo os explicaré lo que un genio ve, sin más, lo ve.
Paso 1: si el voladizo pesa más por delante, atrás levantará… ¿para qué poner un muro?
17/ Y para qué apoyar la galería al suelo si puede ir colgada del pilar central? Fuera esos apoyos.
Paso 2: con lo que pesa el voladizo y si nieva (burda nieve representada en amarillo 😂) hay que rigidizar el pilar central. Pero lo articulo arriba y abajo porque puedo 🙂
18/ Paso 3: aprovecho la rigidez del graderío unido al pilar central…y, coño, lo que pide ahí son dos curvas circulares que encajan perfectamente. (Ese “coño” no creo que lo dijera Torroja 🙂
Y la cubierta, ¿qué forma le damos?…todo lo hemos encajado con curvas…
19/ Necesitamos más altura de cubierta en el pilar que en el voladizo…posibilidades:
– Cilíndricas.
– Cónicas.
– Hiperboloide de revolución.
20/ Correcto: Hiperboloide de revolución. ¿Es una solución fácil? No, es una solución de Torroja. Y por eso él es Torroja y nosotros no.
Mirad que bien se ve el encuentro de los hiperboloides con las pilas en la maqueta del museo Torroja. Qué fino como se va abriendo en el encuentro.
21/ Obra de 1933 con los arquitectos Arniches y Domínguez que aportaron la distribución de espacios y la coherencia visual del conjunto. Este detalle de los encuentros es suyo y me gusta mucho.
22/ Y sólo por confirmar que todos entendemos lo grande de esta cubierta: el espesor de hormigón en el extremo del voladizo es de 5 cm…otra vez, 5 cm…😳 una pasada.
5 cm son esto 👇🏻…tres dedos!!! (Míos:)
23/ Vayan cualquier día de carrera al hipódromo, visiten el Museo Torroja que está dentro y que tiene unas maquetas maravillosas, y disfruten de una de las mejores obras que hay en el mundo.
24/ Y acabamos esta revisión de hoy hablando del tristemente desaparecido Frontón Recoletos. Me dejo muchas cosas atrás por contar, pero cualquier día puedo hacerlo.
Obra de 1935 con el arquitecto Secundino Zuazo. Sufrió varios impactos por bombardeos en la guerra y acabó cayendo.
25/ En esta obra Torroja deja definitivamente la ingeniería a un lado y entra en el arte. ¿Por qué lo digo? Porque el quiebro de las dos láminas asimétricas que va a echar a volar lo es. Porque es movimiento y se aleja de la estática del ingeniero.
26/ Porque Torroja tuvo que pasar por encima del empuje descompensado de las láminas para crear esa visión. Y pudo reforzar de múltiples formas la estructura para que trabajara de otra forma y no lo hizo. Y las fotos dan fe de que era otra cosa. Arte. Y ya.
27/ Hubo varios factores que pudieron ayudar a que cayera: empleo de cemento rápido y descimbrado también rápido. El plazo de la obra fue criminal y eso no creo que ayudara.
La obra la hizo Huarte, donde estaba Fernández Casado y decía que al descimbrar tuvo ya deformaciones.
28/ Pero no nos liemos, cayó por las bombas. Fin.
Fue una obra súper arriesgada, con esos lucernarios en la lámina también. Mi opinión, aunque no vale para mucho, es que hubiera tenido mala vida, pero seguiríamos teniendo una obra de arte de la ingeniería.
Qué me decís de la maqueta
29/ La parte más fina de la lámina de hormigón de 8 cm, ponedle un dedo más a la foto tonta de antes 😉
Mirad el encofrado de madera. Contaba Torroja que había tanta prisa por inaugurar que el dinero daba igual…España 1936…o léase en cualquier época.
Barato no fue, no.
30/ Y ese fue, tras la guerra, una de las causas de que más láminas de hormigón cayeran en desuso: el coste. Sólo Felix Candela siguió su obra al otro lado del Atlántico, pero eso será otra historia.
Y es que Torroja pensaba que no sólo los criterios económicos debían regir.
31/ A los pocos que hayáis llegado hasta aquí os cuento el punto personal: yo hice estructuras en Caminos por este libro que era de mi padre 👇🏻. En cuarto me lo sabía…no sé cómo empecé a leerlo, pero pensé “yo quiero eso”…y si no, contarlo, añadiría hoy veinte años después.
32/ Dejamos a Torroja saliendo de España pocos meses después de que empezara la Guerra Civil de polizón en un barco. Seguiremos en la segunda parte de este capítulo. Espero no tardar en contarlo 😉
Y yo también os dejo por hoy. Ojalá os haya ayudado a conocer mejor nuestra historia.
33/ La bibliografía de hoy (hay uno que no aparece)
Muchas gracias. Buenas noches.
